Por Jose Baez Guerrero

La vida sigue, aparte de pandemia y política. Entre intrigas de resentidos azarosos equivocadamente atribuyendo sus ambiciones de canonjías a otros, alivia el ánimo y entusiasma al espíritu ver que el Ministerio de Cultura entregó los premios nacionales de literatura y de la Feria del Libro.

Este último, con dotación de RD$1,00,000.00 por la Fundación León Jimenes, lo mereció “Entresijos del Viento”, una ficción autobiográfica, por monseñor Freddy Bretón. El premio de ensayo fue al filósofo Fernando Ferrán, por “Los herederos. ADN cultural del dominicano”. En poesía, me sorprendió por su temblor, profundidad y belleza, “No es un soplo la vida” por Daniel Beltré López.

Incluye versos largos, cómo los que preguntó una vez Borges a Federico Henríquez Gratereaux si los había en la poesía dominicana, citándole como respuesta varios de Mieses Burgos.

Ganaron también Martín Paulino, cuentos; Franklin Gutiérrez, novela y Geraldine de Santis, literatura infantil; en teatro nadie concursó. Felicito al ministro Eduardo Selman y los premiados, por recordarnos que tenemos otro país mejor, según prueba cada autor premiado.