Coincidencia de numero y análisis
Por Rafael Céspedes Morillo
Conocí a Greenber padre, hace algunos 18 años en trabajos profesionales en Venezuela. Él hacía para entonces las encuestas para Enrique Capriles R., aspirante presidencial contra Hugo Chávez. Tengo la impresión de que ejerció por muchos años esas labores en varios países con merecida aprobación por su certeza en los resultados y su calidad profesional, ejercida con toda la probidad posible.
Aquí en nuestro país tiene su firma varios años haciendo trabajos de mediciones y evaluación de mercado, vía encuestas directas o presenciales, que hasta donde sé, es el método que usa esa empresa.
Yo no tengo encuestadora, no he hecho encuesta en los últimos seis meses, de modo que mi apreciación del escenario es basada en un puro análisis de las variables que lo componen, interactuando entre y con ellas, créanme que me siento muy, pero muy bien, a tener esa extraordinaria coincidencia de mi análisis con los números que publica un periódico nacional como fruto del resultado de una encuesta hecha por esa firma norteamericana.
Si buscan los números de mi artículo anterior, encontrarán que pronostico que Abinader resultará ganador en primera vuelta con alrededor de un 58%, que Leonel estará alrededor del 25% y que Abel se quedará con alrededor del 15%.
De más estaría decir que coincido en mi análisis con los números de Greenber, pero la verdad es que es Greenber quien con sus números coincide con mi análisis, porque yo escribí primero.
Pasando a otro tema, la posición con la denuncia que hace la Fuerza del Pueblo, vía Rosario, sigue apuntalando mis criterios de que no procura de parte de ese partido una victoria electoral en el área presidencial, porque no es posible que el cúmulo de experiencias que hay en ese partido, con tantos dirigentes de más de 25 cada uno en el ejercicio de la política, puedan creer que anunciando algo tan fuerte como lo dicho, puedan creer que esa persona tiene la fuerza necesaria como para poner en primer punto de la agenda nacional ese tema. ¿Por qué no lo hizo Leonel? Porque no tenía una réplica preparada a la respuesta que daría el Presidente y dicen estar preparándose para ello.
Porqué se manejan en esos y no lo hacen, por lo menos a nivel primario, por las redes sociales, medios que no tienen aun la fuerza necesaria como para agregarle valor y contundencia a una denuncia de ese tipo y nivel, pues ellos saben, como todo el mundo, que las redes son rápidas y masivas, pero efímeras y que no cuentam con el cien por ciento de credibilidad.
¿Acaso solo están amagando, pero no quieren dar, o peor, es que quieren dar un gran golpe con un simple amago? En esta reta final, reitero el título de mi artículo anterior: “aún hay tiempo para descarrilar el tren’’, pero no será con humo. Olviden, que una denuncia simple y llanamente podrá no lograr algo como eso. Para descarrilar el tren, se necesita actuar con inteligencia, sentido de oportunidad, fuerza, contundencia, valor, presteza y coraje, todo esto empleado con calidad.