Mantener nuestro entorno limpio y colaborar con el municipio

Por ROBERTO VERAS
Una vez cada dos o tres días, el servicio municipal de recolección de residuos limpiará la calle, pero inmediatamente el munícipe vuelve a depositar la basura fuera de su casa y comienza a acumularse nuevamente.

La limpieza dentro y alrededor del hogar depende de una actitud mental, que se traduce en acción, de hecho, mantener un hogar limpio depende en gran medida de la actitud de toda la familia, por eso es bueno examinar qué podemos hacer todos para contribuir a la limpieza de nuestros hogares, incluidos los barrios en los que vivimos.

¡Qué agradable es vivir en un lugar limpio, incontaminado! Sin embargo, con el aumento de la basura en el municipio, cada vez es más difícil mantener limpio y ordenado nuestro entorno.

Algunos ciudadanos piensan que los barrios o las casas sucias son sinónimo de pobreza, sin embargo, esto no es necesariamente así, pues cuando las familias han decidido que una vez al día o cada semana, según sea necesario, barrerán y limpiarán las áreas alrededor del exterior de su casa están cumpliendo con un deber ciudadano y mejorando su entorno.

Es cierto que en algunos partes la alcaldía tiene un muy buen sistema para mantener limpios el barrio con rutas y frecuencias, pero en otros lugares no hay un programa municipal público, sino privado, sin duda, el entorno donde vivimos lucirá mucho mejor y será más saludable si todos ponemos de nuestra parte para mantenerlo limpio.

Algunas juntas de vecinos no solo tienen un programa que incluye las tareas mencionadas anteriormente, sino que también educan a sus miembros para que colaboren manteniendo limpio el sitio donde viven.

Estas breves sugerencias sin duda concienciarán a toda la familia de la necesidad de mantener tu hogar y tu entorno limpio, y recuerde, mantener un hogar y sus alrededores limpios no depende de su economía, sino de su actitud en torno a la limpieza.