Por Ángel Gomera

Se acerca el Día de los Santos Reyes, padres y madres preocupados en la búsqueda de qué juguetes regalarles a los niños y niñas para ver reflejada la alegría en sus rostros y así cumplir con una tradición que al pasar del tiempo, ya no será igual, porque se han convertido en jóvenes con otros tipos de anhelos y sueños!

Ahora bien, me atrevo a decir que todos los días del año como padres y madres debemos estar diligentes a regalarles Santos Reyes a nuestros hijos(as) en sus diferentes etapas de su existencia y no precisamente de aquellos juguetes que se adquieren en una tienda o juguetería; de los juguetes a que me refiero, se encuentran en la naturaleza de ser padre y madre, son alcanzables, súper económicos y de suma calidad y duración , los cuales marcarán sus vidas para siempre.

Estos obsequios a brindar cada día y que debemos colocar en el arbolito de su corazón y su mente son: Una Tablet de afectividad, cuya contraseña sea un te amo: un vídeo juego en donde le dediquemos el tiempo necesario para lograr concretizar las metas de sus vidas; un castillo de princesa cuyas paredes estén revestidas de paz; una muñeca que repita palabras que edifiquen; un robot transformers que nos haga rectificar cuando cometemos acciones erróneas; un camión bombero cargado de suficiente diálogo para apagar las crisis y los malos entendidos; una barbie con un rostro de confianza; un juego de cocina en donde preparemos los alimentos que son fruto de un trabajo digno y honrado.

Un kit de muñecos superhéroes con mensajes que orienten a forjar la civilización del bien; un carro control remoto con botones de esperanza; una pelota de la solidaridad que nos la pasemos en los momentos buenos y malos, Un Lego cuyas piezas conduzcan a construir en la inmensidad del alma de esos seres amados el respeto a la vida; un tren con estaciones que marquen las pautas de la coherencia y el ejemplo a seguir! Una bicicleta en donde les enseñemos a transitar los caminos de la fe y un celular que nos acerque más Dios como rector y guía de nuestras vidas!